Bienvenid@s a Biodanza Galaxia, un espacio donde os comparto todos mis proyectos relacionados con el instrumento Biodanza, un sistema de integración y desarrollo humano, que desde que lo práctico y facilito me ha aportado múltiples beneficios y satisfacción.

En las distintas pestañas te hablo un poco de Biodanza, de cada uno de los proyectos que desarrollo y las entradas de este blog (pestaña "Danzando la Vida") puedes descubrir, varios relatos sobre temáticas relacionadas con Biodanza que he ido utilizando para ser danzadas durante las clases regulares, así como información de diferentes aplicaciones y extensiones que tiene Biodanza más allá de los grupos regulares.

Si tienes curiosidad por saber más sobre Biodanza o venir a participar en alguna de las propuestas que realizo, ponte en contacto conmigo sin compromiso para que te cuente más.


Grupos Regulares


Los grupos regulares de Biodanza, son un espacio donde semanalmente se practica Biodanza, son sesiones de 2h. una vez por semana, donde de manera progresiva se va desarrollando un proceso personal acompañado del grupo, a la par que movilizamos nuestro cuerpo, manteniendo lo más ágil y despierto. 

Las sesiones regulares de Biodanza constan de dos parte, una parte verbal y una parte práctica-vivencial.

La parte verbal, dura una media hora y en ella, se dan algunas nociones teóricas sobre el tema a tratar ese día en la clase (en el menú de entrada situado abajo a la derecha de este blog, encontrarás información sobre alguna de estas temáticas) y por otro lado se realiza lo que llamamos el relato vivencial, que es un espacio de expresión emocional verbal, donde compartimos lo vivido en sesiones anteriores, en un ambiente de respeto y no juicio, en un espacio donde poder expresar y reconocer nuestras emociones desde la aceptación.

La segunda parte de la sesión es práctica y vivencial, dura el resto de la sesión, aproximadamente una hora y media. En esta parte dejamos a un lado la palabra y nos ponemos a danzar, a expresarnos desde el cuerpo, facilitando con ello que la parte racional del cerebro pare, permitiendo que la parte emocional e instintiva tome el protagonismo, pasando de un lenguaje verbal a un lenguaje corporal a través del movimiento. 

Gracias a las músicas, las danzas y consignas propuestas por la facilitadora, creamos entre tod@s un espacio protegido de respeto y amor donde reaprender las funciones originarias de la vida, latentes en nuestras células.


  



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