Como ya adelanté en la última entrada, este trimestre de Biodanza lo estamos iniciando danzando la interrelación de las distintas líneas de vivencia con la línea de la creatividad.
En la clase que dedicamos a interrelacionar la creatividad con la vitalidad, conectamos con el pulso de vida que late dentro nuestro y que nos impulsa y moviliza hacia lo que deseamos crear en nuestras vidas, aprendiendo de los movimientos de l@s amig@s con l@s que podemos sintonizar y compartir creativamente parte de nuestras vidas, enriqueciéndolas y construyéndolas desde el amor y la alegría de estar vivos, integrando los 4 elementos (aire, agua, tierra y fuego) en mi movimiento y en mi cotidiano, para engrandeciendo con todo ello mi vida.
A lo largo de esta sesión, también conectamos con nuestras respiraciones, creando una danza a partir de ellas que de a poco nos fue adentrando en el reposo grupal, cálido, protegido, fuente de creación y vida, para despertar de él reforzados en la creatividad y con la capacidad de ser mariner@s de nuestra propia vida y disfrutar de descubrirla a cada instante, en cada momento vivido, sabiéndonos co-creadores de ella.
Una bella sesión para seguir reforzando nuestra conexión profunda con la Vida, la cual me recuerda mi capacidad creadora que late en mi en cada instante de mi existencia.
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